jueves, 11 de diciembre de 2008

Examen de ONU: arma de doble filo para ley de víctimas


Si se certifica al Gobierno nacional por su política en derechos humanos, las aspiraciones liberales de cambiar el proyecto estarían sepultadas. De lo contrario, el Ejecutivo entraría a conciliar el articulado

EL CONCEPTO del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre las políticas del Ejecutivo nacional en esta materia podría ayudar a hundir o a salvar el proyecto de ley que crearía un estatuto de víctimas de la violencia.

La teoría que manejan el Gobierno y los autores de la iniciativa, del Partido Liberal, es que una certificación a Colombia ayudaría a que el proyecto pase como está, es decir, con los cambios que el Ejecutivo le hizo al articulado en penúltimo debate y que no convencieron a la oposición. De lo contrario, los liberales tendrían más argumentos para exigir que el proyecto pase tal y como fue aprobado en Senado.

“Yo creo que es mejor esperar a un pronunciamiento de la ONU al respecto, que creo que no será favorable.

Eso nos daría la máxima razón para aprobar el proyecto como queremos, que es como se aprobó en Senado”, indicó en diálogo con EL NUEVO SIGLO el ponente de la iniciativa, representante Guillermo Rivera.

Entretanto, la posición del Gobierno en torno al tema continúa siendo analizado por los ponentes de la coalición y el gabinete de Álvaro Uribe, a tal punto que en la tarde de ayer el representante Jorge Mantilla fue llamado a una reunión de última hora con el ministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga, para hablar del tema de la reparación administrativa, que en el articulado señala que se establecerían topes de 18 millones de pesos para las víctimas de los agentes de Estado.

Aunque no se conocieron detalles del encuentro, se pudo establecer que el tema sobre el que giró la reunión precisamente fueron los montos de las indemnizaciones para los afectados por la violencia, asunto en el cual Zuluaga siempre ha manifestado que deben ser ajustados al soporte fiscal con que cuenta el Estado.

Una semana más

Aunque se preveía que el proyecto de víctimas sería evacuado rápidamente ayer en la plenaria debido a que se encontraba en tercer lugar del orden del día, la Corporación se mantuvo seis horas hablando del primer articulado en cola, que buscaba el establecimiento de un régimen para los juegos de azar, el cual finalmente fue archivado por petición de las mayorías.

Sin embargo, toda la sesión giró en torno a la discusión sobre si se debía o no reactivar dicho debate, lo cual colmó la paciencia de los representantes que a las 8:30 de la noche pidieron llamado a quórum, que no se completó, y en consecuencia levantaron la sesión.

Los legisladores que quedaron expresaron su inconformismo por el desgaste de la sesión y exigieron respeto por los representantes de las víctimas que han asistido al debate por dos días seguidos sin conocer resultado alguno.

Rivera, quien nunca estuvo confiado en que el debate se llevaría a cabo ayer, pidió que el proyecto fuera prioridad en el orden del día del próximo lunes, cuando se reunirá la plenaria de nuevo, para poder evacuarlo rápidamente y continuar con los 38 proyectos que están en fila de ser debatidos, entre ellos el referendo reeleccionista.

Así las cosas, el presidente de la Cámara, Germán Varón, convocó a sesionar desde la próxima semana a las 10 de la mañana todos los días hasta que la agenda sea evacuada.


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